Se distinguen por su sabor excepcional y su ausencia de pepitas. En los supermercados, a menudo se comercializan como mandarinas, pero su calidad superior las hace sobresalir. A lo largo de los años, diversas campañas se han centrado en destacar sus virtudes.
Características de esta «mandarina»
Son ligeramente achatadas y su peso en el mercado oscila entre 80 y 100 gramos, es verde y adquiere su color naranja sólo si está bajo el efecto de la temperatura invernal. Esta variedad se destaca por ser la más dulce, con un jugo abundante y delicioso. Sin pepitas, es muy apreciada como fruta de mesa y para la elaboración de postres. Su piel es fina y lisa, muy fácil de pelar, y deja un aroma peculiar y muy agradable. Una auténtica maravilla para los sentido.
A pesar de su calidad excepcional, a menudo enfrentan desafíos en el mercado debido a la preferencia por variedades menos sabrosas pero más rentables. Nosotros defendemos la apreciación de la fruta por sus cualidades organolépticas más que por su capacidad comercial.
Beneficios de la clementina
Incorporar clementinas a tu dieta aporta numerosos beneficios para la salud. Son una excelente fuente de vitamina C, flavonoides, betacaroteno y aceites esenciales. Al consumir dos mandarinas al día, puedes cubrir aproximadamente la mitad de tus necesidades diarias de vitamina C y el 10% del betacaroteno, fortaleciendo así tus defensas contra gripes y resfriados.
Además, son ricas en fibra, contribuyendo a prevenir el estreñimiento, enfermedades cardiovasculares y el cáncer de colon. El ácido cítrico presente en ellas no solo le confiere acidez, sino que también tiene propiedades desinfectantes y potencia los efectos beneficiosos de la vitamina C. Su contenido en ácido fólico las convierte en una opción recomendada para mujeres embarazadas, mientras que la variedad de nutrientes ayuda a reponer líquidos y minerales perdidos durante el ejercicio. Suelen ser de las primeras frutas que se les da a los bebés.
Época de cosecha
Se lleva a cabo de noviembre a enero, siendo crucial disfrutarlas en su punto óptimo de maduración. A partir de febrero, su calidad puede disminuir, dependiendo de los cuidados y las condiciones climáticas del año.
Origen y expansión de la Clementina
Existen algunas teorías sobre el origen de la clementina. Según una de ellas, se originó mediante cruzamiento de mandarino común con el polen de una variedad ornamental de naranjo amargo. Fue descubierta y nombrada por el padre Clement Rodier, (de ahí el nombre de Clementina), quien la descubrió alrededor de 1890.